En medio de la escalada de tensiones con Estados Unidos por el despliegue militar norteamericano en el mar Caribe, el dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, encabezó este martes un “encuentro de oración por la paz” y declaró a Jesucristo como “señor y dueño” del país sudamericano.

El acto se realizó en el Palacio de Miraflores (sede del Gobierno) y se transmitió por el canal estatal. Participaron pastores evangélicos, la primera dama, Cilia Flores, y el diputado Nicolás Maduro Guerra (hijo de Maduro), quien es el vicepresidente de Asuntos Religiosos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

“Sepan que este palacio presidencial, verdaderamente, es el palacio del pueblo y a partir de hoy es un altar para glorificar a Dios… un gran altar de oración y de fuerza”, señaló Maduro en el denominado “Encuentro Binacional de Oración por la Paz”.

El dictador leyó un manifiesto en el cual ratificó a Jesucristo como “señor y dueño” de Venezuela. Recordó que la Constitución venezolana establece la libertad de culto, pero sostuvo que, como ciudadano y presidente, se “radicaliza” con Cristo.

“Reconozco al único Dios real y verdadero, el único que adoro y honro, al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo que protege y protegerá a nuestra patria”, reiteró el jefe de Estado.

La tensión entre Venezuela y Estados Unidos se incrementó por la movilización aérea y naval ordenada por la Casa Blanca en el Caribe (que incluye al mayor portaaviones estadounidense). Washington defiende la operación como una acción contra el narcotráfico, pero Caracas la denuncia como una “amenaza” e intento de propiciar un cambio de régimen.

El lunes, Maduro aseguró que atacar “militarmente” a Venezuela sería el “fin político” de su homólogo, Donald Trump, quien insistió en que no descarta ninguna opción sobre una posible intervención en territorio venezolano.

Maduro también afirmó que hay “un empeño de sectores de poder en los Estados Unidos por destruir al presidente Trump” con dos temas, uno sobre el pederasta Jeffrey Epstein y el otro sobre Venezuela. A pesar de la gravedad de la situación, el líder chavista se mostró dispuesto a hablar “cara a cara” con Trump, quien se declaró abierto a conversar con el sudamericano.

El panorama se tensó aún más luego de que el Departamento de Estado de EE. UU. anunciara que designará como organización terrorista extranjera al Cartel de los Soles, un grupo al que Washington vincula directamente con Maduro.