Durante el mediodía, una tormenta aislada se desarrolló en la Sierra de Ambato y alcanzó gran altura. Al llegar al tope de la troposfera, la nube de tormenta formó un yunque, que se extendió y cubrió parcialmente el cielo de la ciudad.

Sobre la base de ese yunque aparecieron las nubes mammatus, unas formaciones poco frecuentes que se reconocen por sus “bolsas” o protuberancias redondeadas. Se generan cuando hay aire frío descendiendo desde la parte superior de la nube, en un ambiente muy inestable.

Aunque suelen verse asociadas a tormentas fuertes, las mammatus no representan peligro por sí mismas, sino que son un claro indicador de que en la atmósfera hay turbulencia y procesos intensos en altura. En este caso, simplemente acompañaron la expansión del yunque de la tormenta que se formó en la Sierra Ambato.

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